Hace 19 años iniciamos nuestra andadura con las primeras olimpiadas escolares, lo hicimos con la inquietud y la incertidumbre de los resultados ante una movilización tan grande de alumnos. Pero también desde la certeza de que con trabajo, interés y dedicación los objetivos propuestos saldrían adelante.
En la actualidad se lleva a cabo con alumnos/as del tercer ciclo de Educación Primaria de nuestro municipio en dos jornadas: una de atletismo y otra de deportes de equipo y natación.
Para llevarlas a cabo es necesario que todos los miembros de las diferentes comunidades educativas de los diferentes centros (padres, profesores, alumnos) y de las instituciones locales (Patronato Deportivo Municipal, Policía Municipal, Protección Civil…) se impliquen de una forma activa. Es muy importante concienciar de que el objetivo de canalización de las olimpiadas es lúdico-deportivo y solidario.Y a partir de ahí conseguir otros muchos objetivos.
Durante estos años hemos podido asistir a verdaderos ejemplos de unión, de respeto, de saber ganar y perder de convivir de forma respetuosa y tolerante con otros alumnos/as, profesores/as y padres. También, aunque un escaso número, han existido algunas situaciones poco ejemplarizantes, ante las cuales no podemos hacer oídos sordos sino reflexionar y buscar soluciones.
Felicitemos y animemos a los primeros para que su ejemplo sirva de modelo y tendamos una mano a los segundos, para que a través de la actividad física mejoren su autoestima, alivien sus problemas y se sientan útiles y valorados.
Sólo se puede aprovechar la ocasión para mejorar cuando se brinda esa ocasión. Misión nuestra como educadores es poner en práctica todos aquellos recursos organizativos, pedagógicos y materiales que promuevan las relaciones entre el alumnado en un ambiente solidario, cooperativo y tolerante.
Muchos son los cambios que se han producido en estos años, y cada vez más la sociedad está concienciada de que nuestra corporeidad es una fuente de aprendizaje, de bienestar, de salud, de placer, de esparcimiento y por ello es preciso darle una debida atención en la educación. Canalizándola adecuadamente desde edades tempranas, creando hábitos de práctica saludable, y continuada; estableciendo las bases de una educación para el ocio.